Estos campo de juego improvisado generalmente eran construidos por los propios jóvenes que quería jugar allí; primero era cuestión de contar con el terreno y que nadie nos echara del lugar rápidamente...Al ser terrenos fiscales o abandonados generalmente nadie reclamaba ni se enojaban con los chicos que jugaban largas horas allí divirtiéndose, salvo algún vecino que no lo dejaban dormir la siesta por los gritos; y como suele suceder muchas veces el más gordito estaba destinado a ser arquero, el alto por lo general se lo elegía como delantero para que fuera a cabecear, El fuerte se lo ponía como defensor para que parara sí o sí a los delanteros adversarios.
Generalmente el equipo se elegía por pisadita, un sistema que permitía elegir a uno de los lideres a sus compañeros de equipo uno por uno.
Se acordaba el tiempo de duración de cada tiempo de juego, qué solían durar unos 30 minutos con 10 minutos descanso y otros 30 minutos más hasta el final del partido.
Desde estas canchas improvisadas más de una ves salió un gran jugador de renombre internacional.
Como así también es el caso de Óscar que le tocaba atajar con bastante mala suerte porque siempre terminaban goleandolo, hasta que se da cuenta que jugar al fútbol no era su fuerte y terminó siendo un exitoso empresario qué se dedicó a vender camisetas deportivas, pelotas de fútbol, tenis,basque y voley, a quienes realmente sí, podían lucirse en una cancha.
Con derechos de autor
Omar Salgado
*Foto del equipo de Victorino de la Plaza, desconozco el año
